SOLUCIÓN DE MESSER
Para evitar la actividad microbiológica no deseada durante la vendimia, se reduce la temperatura de las uvas. En este caso, se recomienda especialmente el enfriamiento con hielo seco.
Las uvas frescas se enfrían inmediatamente después de la vendimia con hielo seco. Para ello se pueden utilizar trompetas de nieve fijas o manuales. También se pueden añadir manualmente pellets de hielo seco. El gas frío protege las uvas de una fermentación prematura no deseada.
La refrigeración de la uva con hielo seco ofrece, en particular, las siguientes ventajas:
- Refrigeración eficiente y rápida
- Desplazamiento del oxígeno
- Controles fáciles de manejar
- Bajos requisitos de espacio y personal
- Bajos costes de mantenimiento
- Costes de funcionamiento asequibles
- Messer ayuda a seleccionar el proceso y a proporcionar las instalaciones técnicas y el dióxido de carbono necesarios.

